Presenta su bebida de aperitivo: Lillet

Lillet es un clásico aperitivo francés, elaborado con vino, que forma parte del extenso catálogo de Pernod Ricard España, caracterizado por la innovación y la exclusividad.
Su origen se encuentra en el siglo XIX en la región gala de Burdeos, cuando los hermanos Lillet, Paul y Raymond, fundaron la Maison Lillet en 1872 en el pequeño pueblo de Podensac.
Esta bebida de aperitivo se elabora con grandes vinos de Burdeos seleccionados por sus cualidades organolépticas e infusión de naranja dulce.
Las maceraciones se llevan a cabo de la misma manera en que se vienen realizando desde el siglo XIX, a través de maceración en frío de frutas en alcohol de forma separada. Las cáscaras de naranja y la corteza de cinchona se seleccionan con esmero cada año. Después de unas semanas, cuando los ingredientes clave se han extraído, se procede a la extracción y prensado de la fruta. Esta fase juega un papel muy importante en la riqueza aromática de Lillet.
La corteza de cinchona, importada por Francia desde el siglo XVII, ayudaba a estimular el apetito y se recetaba a pacientes desnutridos. Gracias a la combinación del vino con la quinina, a lo largo del siglo XIX ganó la reputación de vinos tonificantes. Se vendían en las farmacias y tuvieron un gran éxito en Europa y Estados Unidos.
Este aperitivo francés, que hace guiños al público femenino, está compuesto por la siguiente gama: Lillet Blanc, Lillet Rouge, Lillet Rosé y Lillet Grande Réserve 2012, una edición limitada presentada en Alemania en 2016. Pero en el mercado español se distribuyen sólo Lillet Blanc y Lillet Rosé.
Respecto a Lillet Blanc, elaborado únicamente con vinos blancos, cabe decir que despliega toda la frescura de un aperitivo con un sabor suave y afrutado y una estructura carnosa. Su nota de cata revela un bonito color dorado, una nariz floral y un gusto a aromas de naranjas confitadas, miel, resina de pino y frutos exóticos. Posee un final largo. Cabe señalar que envejece en barricas de roble durante muchos meses, suavizándose sus aromas y madurando sus característicos sabores. El roble procede del Bosque de Tronçais, que abasteció originariamente a la marina francesa. Este roble es apreciado para la fabricación de las barricas de coñac y de los grandes vinos.

 

Leer el artículo completo en la revista