El ‘boom’ de la coctelería ha ayudado a la aparición de muchas bebidas perfectas para realizar combinaciones con sabores fuertes y diferentes. Sin embargo, su evolución las ha llevado a convertirse en una opción más para tomar estos ‘mixers’ como refrescos

Hace años que los ‘mixers’ se convirtieron en un protagonista más de las mezclas que salen de las manos de los ‘bartenders’. Las compañías apostaron por crear matices nuevos que enriquecían los cócteles dotándolos de un abanico de sabores que iban más allá de la tradicional tónica, naranja, cola o limón.

Sin embargo, con el tiempo, muchos de estos ‘mixers’ han asumido tanta entidad que son perfectos para tomar solos si lo que se quiere es disfrutar de sensaciones diferentes en tragos sin alcohol y que amplían el abanico de la oferta.

Esto se debe, sobre todo, a un gran cambio creciente en los hábitos de consumo que se está produciendo en nuestro país, y en todo el mundo, donde los adultos buscan cada vez más bebidas no alcohólicas con sabores fuertes y variados.

“Como sociedad, ahora aceptamos mucho como la gente elige socializar con otros tragos y la industria de las bebidas ha respondido con una innovación asombrosa en este territorio”, explican desde la marca británica de ‘mixers’ London Essences.

“La versatilidad de los productos Schweppes los hacen aptos para su consumo solos, si se ofrecen en refrescos bien preparados, una tendencia que está empezando a competir fuerte con el mundo de la mezcla”, añaden desde esta marca que pone dos ejemplos claros de ‘perfect serve’ en los que han venido trabajando para sus variedades: “Por un lado la tónica original servida directamente sobre cuatro hielos y potenciada en su sabor cítrico con una rodaja de limón, y por otro, el Schweppes Pink, que replica este proceso pero con una rodaja de naranja”.

Lo mismo ocurre con los productos de la marca Fever-Tree que, aunque en principio están pensados para acompañar a destilados más premium, “la elaboración está muy cuidada, usando solo ingredientes naturales, agua de manantial, además de un carbónico muy suave y una burbuja fina, por lo que se puede tomar como refresco”. Su recomendación para este uso son la gama de ‘gingers’ o la Sicilian Lemonade.

Leer el artículo completo en la revista