El sector trabaja por la búsqueda de un equilibrio entre los costes de producción y demanda, por UN BALANCE entre los canales de comercialización, y por un incremento de la competitividad y las nuevas tendencias, según Anfaco-Cecopesca
Las conservas de pescado y marisco son uno de los grandes tesoros de nuestra gastronomía española. Se trata de productos esenciales en la dieta, muy apreciados por los consumidores y por los profesionales de hostelería.
Sus saludables propiedades ofrecen una serie de ventajas para su consumo en los hogares y en los establecimientos de hostelería. Como señala la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescados y Mariscos (Anfaco-Cecopesca), una de estos beneficios se basa en la nutrición, ya que de acuerdo con los valores medios y aproximados de su composición nutricional, las conservas de pescado y marisco poseen un alto contenido en proteínas y en ácidos grasos omega 3 (EPA y DHA). Además, por su contenido en algunas vitaminas del grupo B y en minerales como el fósforo o el selenio, son consideradas fuentes de estos oligoelementos. Por tanto, se integran fácilmente dentro de una dieta equilibrada.
Otra ventaja es la variedad, que debido a ella y a sus formas de presentación se adaptan a los hábitos de consumo de los consumidores y facilita la elaboración de un gran número de recetas.
La conveniencia es también otra de sus características, porque estos productos no precisan condiciones especiales de almacenamiento ya que su conservación en perfectas condiciones de seguridad higiénica responde a su envasado hermético y posterior proceso de esterilización térmica. Además, las conservas de pescado y marisco están sujetas a una fecha de consumo preferente larga.