Reconoce que cuesta ver a una mujer dirigiendo una barra pero cada vez es más habitual: “El talento está”. Y ella es la prueba en su ‘speakeasy’ barcelonés. Eso sí, ni hablar de cócteles de hombres o de mujeres

Todo el mundo sabe qué es un ‘bartender’ o barman, pero no todos podrían decir cómo se llama a una mujer que dirige la coctelería. La ‘barmaid’ Cecilia Hakim advierte de que en su Argentina natal aún sigue “habiendo mucho machismo en la gastronomía, aunque las ‘bartenders’ allá estén haciendo un gran trabajo para cambiarlo”.

De ella han dicho que tiene “mal carácter” o que es difícil “por no ser sumisa”: “Pero creo en la igualdad y no por ser mujer me voy a callar aunque siente mal a quien está al mando”. A Hakim no le cuesta reconocer que ha cobrado sueldos menores que sus compañeros hombres y que ha habido clientes que pedían que les atendiera otro ‘bartender’ masculino. Sin embargo, Cecilia es muy optimista porque “si bien yo he pasado situaciones que no fueron gratas, quienes estuvieron antes que yo las han pasado aún peor”.

En Europa y en EE.UU. la cosa detrás de la barra se mueve casi a ritmo de coctelera y cada vez se encuentran más mujeres ‘barmaids’. “El talento siempre estuvo. Simplemente ahora se está empezando a reconocer y eso motiva a más chicas. Es muy positivo que haya igualdad de representación en este mundo y creo que hacia allí vamos. En el futuro las barras dejarán de tener género y tendrán equipos de ‘bartenders’”, explica.

Pasar por muchos bares y ciudades le ha dado algunas certezas sobre los gustos de los clientes: “Los cócteles no tienen género. No existe el cóctel de chica y el de chico. Existen diferentes tipos de paladares, tipos de percepciones distintas, de momentos de cada persona y de momentos de cada barra. Conozco muchas chicas que beben ‘scotch’ ahumado y muchos chicos que aman los cócteles de bajo contenido alcohólico y dulces”.

Por eso reivindica la labor del profesional para acabar con las “bebidas rosas” destinadas al público femenino. “Está también en nosotros como profesionales quitar los tabúes respecto de las bebidas y dejar de asumir que el ‘Negroni’ es para el marido y el ‘Mojito’ para la mujer. Muchas bebemos ‘Old Fashioned’, ‘Sidecars’ y ‘Rusty Nails’”, advierte.

Lo mismo le ocurre en la barra. Para Cecilia Hakim no hay dos formas de crear en función de si eres hombre o mujer, sino que todo es cuestión de la personalidad del que mece las cocteleras.

“Cada ‘bartender’ tiene su propio estilo (al menos los que llevamos algunos añitos detrás de la barra) y eso marca las creaciones de cada uno. Hay quienes prefieren los clásicos, quienes prefieren lo ‘gastro’ y quienes optan por la coctelería molecular. Esa es la mejor parte de la coctelería que hay tantas formas de hacer cócteles como ‘bartenders’ existen”.

Lo suyo con las mezclas fue lo que ella misma denomina “un perfect match”. “Creo que este mundo me encontró”, bromea. Y destaca el valor de los fracasos (ensayo y error) para seguir avanzando y aprendiendo en este mundo donde entró con apenas 20 años, dejando de lado la carrera de psicología que había empezado ya.

 

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