Como miembro de la prestigiosa asociación Relais & Châteaux, el primer hotel en Andalucía de la misma, acaba de abrir sus puertas en el casco antiguo de Marbella para impregnar al huésped de la cultura y patrimonio local
Si de hospitalidad se habla, hay un lugar en la Costa del Sol que es el cuna del recibimiento por excelencia: Marbella. Morada de diversas civilizaciones, desde mediados del siglo XX la ciudad andaluza vio nacer y crecer múltiples construcciones hoteleras que acogían a turistas de todos los rincones del planeta. Marbella se erigía como símbolo del ‘glamour’, de la diversión y punto de encuentro de la ‘crème de la crème’, y a día de hoy continua luciendo con orgullo esa etiqueta.
Tan acogedora es la ciudad que acaba de abrir sus brazos al primer miembro de la prestigiosa asociación Relais & Châteaux en Andalucía. Así, la Plaza de Santo Cristo, en pleno casco antiguo, abría el día 1 de este mes de abril las puertas de un nuevo establecimiento, la Fonda Heritage Hotel. Un hotel ‘boutique’ con encanto que sumergirá al huésped en la cultura marbellí.
Muchos avatares le ha deparado el destino a la Fonda Heritage. De residencia privada a un lugar de culto y, posteriormente, a un centro de enseñanza. Pero, a finales de los años 60 del pasado siglo abría sus puertas como un hotel de lujo, obra transformadora de los diseñadores Jaime Parladé y Duarte Pinto Coelho. Desde entonces, ya se disponía a anidar su merecida fama turística, y a finales de la década de los 80, la Fonda se convirtió en el primer restaurante con Estrella Michelin de Marbella. Un espacio que fue, durante muchos años, el lugar de encuentro de la ‘jet set’ internacional, intelectuales, artistas y aristócratas, lo que contribuyó a ese desarrollo turístico de la ciudad.