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El neoyorkino Jeff Bell, Mejor Bartender 2017 por ‘Tales of the Cocktail’, del mítico Please Don’t Tell, ha estado recientemente en Madrid elaborando cócteles dentro del proyecto Seagram’s New York at NH Collection Suecia

El proyecto Seagram’s New York Hotel at NH Collection Suecia (www.nh-hoteles.es/eventos/seagrams-ny-hotel) acaba de despedirse de Madrid el pasado 24 de marzo, en este segundo viaje realizado a nuestro país. Todos aquellos que han traspasado el umbral del NH Collection Suecia desde mediados de febrero han podido impregnarse del ambiente, aromas y sabores neoyorkinos. Haciendo una parada en terreno ‘mixológico’ allí se ha podido disfrutar de buenos cócteles elaborados con Seagram’s Gin por manos expertas procedentes de las mejores coctelerías de una ciudad como New York, que causa tendencia.

En esta ocasión, tenemos el placer de presentarles a Jeff Bell, ‘Mejor Bartender’ de 2017, según ‘Tales of the Cocktail’, de Please Don’t Tell, Mejor Bar del Mundo en 2011 por la ‘World’s 50 Best Bars’. Con estas credenciales, el arte que derrocha con la coctelera no es nada baladí. Conozcamos su trayectoria.

¿Cómo se llega a ser el Mejor Bartender?
“Es un viaje largo, pero hay tres puntos determinantes como son el trabajo duro, ser humilde y el sitio donde vives. Tengo la suerte de vivir en Nueva York, que es una ciudad a la que todo el mundo va y, una vez allí, seguro que pasan por el local Please Don’t Tell, una de las grandes referencias de la coctelería a nivel mundial. Pero, otro de los factores es que llevo 8 años en Pdt, lo que contribuye al éxito de un ‘bartender’, porque cuando cambias de bar pierdes un poco, es como resetear, volver un poco atrás. Pasar tantos años en el mismo bar hace que tu nombre esté asociado al local, es una relación mutua”.

Pero su recorrido en la profesión viene de más atrás…

“Estuve trabajando en coctelería durante 4 años antes de Pdt, y cuando llegué a este bar tenía algo de experiencia y sabía cómo gestionar una barra. No obstante, mi recorrido es mucho más largo porque desde que tengo 16 años trabajo en la hostelería. Ya llevo 12 años en coctelería, y siempre me ha atraído por el contacto directo con la clientela, el tener una relación humana más cercana”.

Jeff Bell acudió a Madrid dispuesto a enamorar con sus tragos en el ‘rooftop’ del hotel, en los que Seagram’s Gin actuaba de anfitriona, adecuados al público español aunque ha replicado alguno de sus cócteles neoyorkinos. “El Pdt es un bar de sótano, un poco escondido, aquí estamos en la azotea y la cultura de la bebida en España es muy diferente de la americana. En EE.UU. la gente bebe mucho y rápidamente en pocas horas, en España hay más cultura de beber durante el día, tomarte tu vino, un ‘gin tonic’… En la carta que vamos a hacer estos días hay cócteles que no hacemos en Pdt, hay más tragos largos y aperitivos, aquí usaremos vermú, sidra, ‘sherry’, cosas de baja graduación alcohólica, para aportar la sensibilidad del Pdt a los momentos de consumo de España. No obstante, hemos extrapolado de nuestro bar el cóctel ‘El Torero’ que es la versión de un ‘gin tonic’ o de un ‘Tom Collins’, con Segram’s, como se podría servir en Nueva York, pero adaptado a los ingredientes y a los sabores que puedes encontrar en España. Seagram’s es una ginebra de corte clásico pero con una dimensión bastante presente de los cítricos, es ideal para tragos refrescantes y viene muy bien para trabajar en los bares de azotea.

El Pdt es un bar oculto al que se accede a través de un local de perritos calientes y después de marcar un número en una cabina telefónica. Algo complejo. ¿Esa complejidad se traduce en los cócteles que allí se preparan?

 

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