El establecimiento santanderino que se hace llamar “El Italiano” se presenta sin tapujos. Al descubierto y de forma natural, indicando ya “a pecho descubierto” lo que se cuece en sus fogones. Una cocina “100% made in Italy fuera de la República de Italia”, como señalan los autores del proyecto, avalada por la autenticidad de sus ingredientes y su genuina forma de cocinarlos. A fuego lento, con paciencia, de la forma más natural posible y como cocinaban las abuelas y, por supuesto, manteniendo la tradición, tal y como comenta Matías Poveda, jefe de cocina del restaurante. En la excelsa selección de materias primas, los productos de la empresa Negrini, importadora y distribuidora de artículos enogastronómicos de alta calidad en el mercado ibérico, tienen mucho que decir.
“Los productos que utilizamos tienen nombre y apellido, son de muy buena calidad y además intentamos siempre que sean lo mejor de lo mejor. Nosotros conocemos la trayectoria que tiene Negrini en España y por ello no dudamos ni un instante en ponernos en contacto con la empresa para conseguir un producto de muy buena calidad. El restaurante “El Italiano” se abrió en mayo de 2015 y desde entonces trabajamos con Negrini; compañía que ya conocíamos Carlos Zamora, el propietario del restaurante, y yo, debido a nuestra trayectoria laboral en el Grupo VIPS en Madrid.
Por eso no se cuestionaron el hacer acopio de diversas categorías de productos de Negrini, que deleitan a los paladares desde hace 27 años; entre ellas los embutidos, pasando por su cocina el ‘prosciutto cotto’, el ‘guanciale’, la ‘pancetta arrotolata’ o su ‘mortadella’, de la que destaca el chef su genuino, marcado e inconfundible sabor, que transporta al comensal a su provincia de origen: Bolonia. “Un producto que me encanta y que simplemente con pan es delicioso”, señala Matías Poveda.

 

 

Leer el artículo completo en la revista