Se presentó en sociedad hace pocos meses, y ya la ha conquistado. Su esencia viva, dinámica, alegre, con chispa, de personalidad arrolladora, transmisora de nuestra tradición española, de forma atractiva y divertida, se deja sentir. Una tradición que no está anclada en el pasado sino que refleja la España abierta al mundo que somos, ampliamente preparada para salir al exterior. De hecho, la exportabilidad es otro de los puntos que forman el ADN de Tatel. Un mensaje claro, transparente y sin confusión perfectamente reconocible por la clientela, como le gusta a Nino Redruello que así sea, socio del proyecto y asesor gastronómico del establecimiento, junto con su amigo y compañero Patxi Zumárraga. “Lo más importante es que cuando un cliente se vaya de tu casa y le pregunten: ¿qué era Tatel?, sepa resumir en tres palabras fácilmente lo que es Tatel. En Tatel transmitimos tradición, con un toque muy sutil nuestro presente en los platos, que llevan la misma línea desde que uno entra por la puerta hasta que se marcha. Quiero que la información que llegue es que en Tatel lo bonito es la esencia, que los platos están hechos con mucho esmero partiendo desde la receta en sí. Lo más importante es el sabor, no quiero transmitir que se ha perdido el tiempo en ponerles florituras o salsas que enmascaren el producto y que parezca que el ‘look’ es lo más relevante”, afirma Redruello.
Tatel se levanta en el número 36 del madrileño Paseo de la Castellana. Total es nada. La claridad, la transparencia, el ‘glamour’, el bienestar, y el hecho de que sin duda se va a vivir una experiencia única, que pondrá en movimiento los cinco sentidos, se advierten desde el momento en que se traspasa el umbral de la puerta. Ambiente relajado e informal, sonrisas dibujadas en los rostros del personal, de trato exquisito y buen hacer, una decoración envolvente y de lo más acogedora, que preserva esa intimidad en las conversaciones dentro de la efervescente atmósfera que lo caracteriza, su coctelería, su música en vivo cada noche…, son aspectos que cautivan al cliente de este proyecto que tantos personajes relevantes encierra en su interior.

 

 

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